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Freudiano, Pelirrojo, comilón de libros, comida, personas, crítico con todo el mundo, ni yo me salvo, deportista, intento de escritor, músico e hijo. Intento escribir poesía, no me creo poeta, ni nada por el estilo, me gusta escribirlas de forma rápida, ya que rápidos son los sentimientos que crean la poesía. www.fotolog.com/xxzanaxx

domingo, 9 de octubre de 2011

Lucky You

Desnuda, tú, en mi cama,
eres como la noche que nos cierna,
oscura en tus ojos, y por pelo estrellas,
inmensa, grande, e impenetrable.

En tu blanca piel aún se aprecian,
mordiscos, de nuestra noche en vela.
Y resuenan, en el eco, gemidos,
de los que dedicabas a mi oído.

Poco a poco, llegamos al momento,
no existe nada, solo tu cuerpo,
y no quiero volver al mundo.

Un beso, y hazme mudo,
de tu vientre un muro,
a escalar con dientes.

Alcanzar, tu boca se hace humo.

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Son las tres menos no se cuantos de la noche, y ando nervioso. Acabo de escribir eso, que realmente no me gusta nada, pero hace tiempo que no publico poesía y tocaba. Desde las 12 que me metí en la cama, hasta ahora he matado un mosquito y le he dado vueltas a la misma rotonda mil veces. Estoy escuchando The National, me tranquiliza bastante, voy a intentar volver a dormirme.


Los sentimientos, florecen siempre en el peor momento.

sábado, 8 de octubre de 2011

Pero tú nunca la comprenderás


..La poesía es como el viento,
o como el fuego, o como el mar.
Hace vibrar árboles, ropas,
abrasa espigas, hojas secas,
acuna en su oleaje
los objetos que duermen en la playa..."
José Hierro

domingo, 2 de octubre de 2011

Cuando la ira no se distingue de la tristeza, llegado ese punto, hay que vaciar.
Algunos, lloran mientras destrozan su almohada con las uñas, otros, comen intentando llenar un agujero negro y otros, deciden simplemente salir a correr, así la fuerza del viento, hace que, la lágrima en vez de caer sobre la mejilla, se vaya hacía un lado, y caiga bordeando la oreja.
No sabía si había elegido bien, sólo le quedaba esperar, el tiempo le daría la respuesta, se acabaría arrepintiendo o alegrando, y esperar a todo hombre, le desgasta por dentro. Muchas veces, el tiempo, se convierte en millones de termitas, que te empiezan a comer por dentro hasta que terminas vomitando de desesperación.
Cuando corría, gustaba de distraerse mirando su sombra, y cuando se alargaba, la farola estaba lejos, oscura y larga se extendía, y cuando la tenía debajo, la farola estaba justo encima de él.
Pensaba que en el desierto, en el atardecer, llegaría su sombra hasta el horizonte y como decía rimbaud, se podrían fundar con la eternidad.
Y así a lo tonto, parece que va pisando las termitas.